21 julio, 2007

Un tipo que juega en un subibaja

Aca me encuentro, en el aeropuerto de Tel Aviv esperando un avion rumbo a Madrid. Es cualquiera. De fondo una distorsionada voz me cuenta que esta prohibido llevar armas en el equipaje. Apalala! Avisen antes, che. Yo habia seguido el consejo de Rober y traje la metralladora. Segun mis padres se dice Ametralladora. Yo digo que quiero que metralle, no que ametralle.

Me fui sin despedirme de este sitio y hoy al volver a sumergir mis manos en las aguas cyberneticas vi como algunos se ocuparon de mantenerlo algo activo.



Ahora que me estoy yendo de Israel comprendo que esta tiempo no era un viaje: eran dos. Uno que esta terminando y el otro que esta por empezar. Y esta division es necesaria. Los dias aca fueron eternos: durmiendo muy poco (despertando temprano para acostarse tarde), conociendo mucho lugar nuevo y siempre sin caer donde esta uno. Sin esta division no podria no mirar a los proximos casi cincuenta dias en Europa con puro y simple terror. Sigo sintiendo que me fui de Buenos Aires hace mucho y si pienso que ese "hace mucho" fue solo un quinto del viaje o algo asi me voy a tener que tirar por ahi, en algun rincon de este aeropuerto, a llorar.

Por suerte ya llore y ya rei y el tema del idioma o de la soledad no es nada grave parece (estoy tratando de decir mucho en pocos renglones, perdon por la mezcla de cosas). Me di cuenta que voy por este lugar usando el canto como ca(enie)a de pescar, esperando que algun acuatico ser hispano parlante muerda el ansuelo y pueda recordar mi idioma fuera de algunos de los libros que traje.



Viajar hace bien, parece, era verdad. Uno se va dando cuenta de que cosa es un mundo y que cada uno es un mundo en cada parte del mundo. Quisiera seguir asi, en esta huida de lo cotidiano, en la busquerda por lo original, solo para darme cuenta que lo original puede aparecer en lo cotidiano si me esfuerzo un poco y que lo cotidiano siempre va a existir dentro de mi estomago. Siento que ya me pegaron varias cosas y reafirmo la frase cuando me doy cuenta que con solo pensarla se me llenan los ojos de lagrimas. Casi llorando, casi riendo, rodeado de israelies me voy despidiendo. Solo queria pasar a decir el "presente" y ver si podria decir algo. Creo que pude.

Para terminar quiero dejar muy clarito que extra(enie)o y quiero mucho a los que extra(enie)o y quiero mucho y quisiera que lo tengan tan presente como yo.

Notitas:
En la mitad la internet se cago y tuve que reescribir varias cosas. Soy de creer que ese corte, esa reactuacion se nota y me jode que haya sido asi, pero buen... es asi, ya te dije.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

acordate lo que te dije de las españolas!!! despues confirmamelo!!!

espero que cuando vuelvas sigas diciendo isrrrael (con erre) y no israel (con ere)

tened cuidado en el antiguo continente

Anónimo dijo...

mati, me hiciste llorar, posta, posta!

disfruta estos 2 viajes en todos los aspectos. mientras los estes haciendo, mientras estes recorriendo los paises mas locos del mundo.

y despues segui disfrutandolos cuando vuelvas aca si volves), recordando todo lo que te pasó.

abrazo mati. manda mails

Sniper dijo...

You've just been shot.

Matias dijo...

tomi: yo siempre dije israel con ere, que conste... y de las españoles ya inicie mi estudie cientifico... no viene tan bien...

fresqui: kna kiey, mira al puto como llora, jaja... buen che, supongo que te habras sentido identificado no? en fin... gracias por los saludos y apoyos morales a larga distancia... por aca o por mail... hablamos...

sniper: me siento en mi pre adolecencia counteriana...

Vivianne dijo...

Mira tu!!! suerte la tuya envidia para los que deben trabajar y trabajar, bueno aprovecha manda fruta y fotos, problemas de frenillo o pronunciaciòn, brisas sureñas....